El Consejo de Ministros ha aprobado el pasado 18 de octubre, a propuesta de la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social en funciones, María Luisa Carcedo, un real decreto donde se establecen nuevas reglas, garantías y requisitos para extremar la protección de pacientes y profesionales ante la exposición a radiaciones médicas ionizantes.
Según este decreto, se pretende dar una respuesta ante la necesidad de aumentar el rigor en el caso de las exposiciones debido a las innovaciones tecnológicas y científicas, así como a la introducción de nuevos procesos dentro de la práctica clínica. De esta forma, se conseguirá reforzar al información a los pacientes, la notificación de las dosis de radiación de cada procedimiento y los programas de control de calidad del equipamiento.
Una de las principales aportaciones del RD es la definición de las condiciones de aplicación de estas técnicas con la finalidad de que las exposiciones radiológicas proporcionen un beneficio neto respecto al riesgo asumido y que se mantengan las dosis individuales tan bajas como se puedan.
Regula aspectos novedosos como la protección de la infancia, la mujer durante el embarazo y la lactancia, las personas cuidadoras, los voluntarios que participan en programas de investigación, las exposiciones accidentales y los procedimientos que impliquen altas dosis para el paciente. Además, reconoce el derecho de los pacientes a ser informados sobre los riesgos y beneficios de las pruebas y de las dosis a las que se exponen.